MODERNA BUENOS AIRES

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Sitio: En el barrio de Belgrano, sobre un terreno de medidas reducidas (9,52m de frente x 13,90m de fondo), con un frente hacia el oeste sobre una calle arbolada, y un fondo hacia el este con vista hacia un pulmón de manzana con jardines, los arquitectos Ferrari Hardoy y Kurchan resolvieron un edificio de 4 pisos destinado a vivienda multifamiliar.

El edificio: Planta baja destinada a hall de entrada, portería, estacionamiento nocturno de vehículos, baulera y servicios,
Piso 1º a 3º, Planta tipo, viviendas destinadas a alquiler
Piso 4º, es la planta atípica destinada a la vivienda de los propietarios, un matrimonio joven con necesidades funcionales prefijadas.

Concepto Espacial: Las unidades tipo se diseñaron con el fin de lograr la mayor flexibilidad, versatilidad y transformabilidad posibles, para poder cubrir diferentes requisitos de espacio y con la idea de los autores de que “una casa puede atravesar más fácilmente el tiempo si es adaptable a necesidades cambiantes que si es rígidamente proyectada sobre lo actual”. Las plantas se estructuraron con una parte fija y una transformable: 
En la parte fija se encuentran las áreas de servicio y núcleo circulatorio. 
Una entrada principal con un palier de escasa altura (2,20m) al que se llega por el ascensor, una entrada de servicio a la que se llega con un núcleo de escalera separado del volumen construido, y unido a éste por medio de una pasarela que llega al balcón-lavadero, una habitación de servicio con su baño, cocina y baño principal. Las cañerías, pintada cada una con su color reglamentario, bajan por un pleno fácilmente accesible junto a la caja del ascensor. 
En la parte transformable se encuentran living y dormitorios. 
Un hall de entrada formado por la losa baja del palier que penetra en el living cuya altura es de 3m; el living está comunicado con el dormitorio contiguo a través de puertas plegables hacia ambos lados dentro de espacios especialmente diseñados para albergarlas, a fin de lograr una total unión de dichos ambientes. Ambos ambientes dan a la calle. El segundo dormitorio da al jardín y está separado del dormitorio a la calle mediante dos amplios placards de piso a techo y de pared a pared, con contactos de cierre hermético, movibles sobre ruedas de goma, corriendo sobre los zócalos a modo de rieles, pudiendo al colocarse de diferentes maneras lograr múltiples distribuciones. 

Calidad espacial: Visuales al verde desde todos los ambientes, buen asoleamiento, continuidad espacial por debajo del edificio, terraza jardín con césped y canteros en el piso atípico, son intenciones de los arquitectos presentes en esta obra.
En la planta baja un espacio abierto separado del hall principal de entrada por un muro de piedra de Mar del Plata de forma libre para acompañar la circulación, une la calle con el jardín dando continuidad a la vegetación por debajo del edificio. 

Fachada y color: Las carpinterías hacia la calle son de piso a techo para acaparar mayores visuales hacia la calle arbolada, introduciendo así el exterior en la vida diaria; es asimismo intención de los arquitectos que a la noche dichas ventanas irradien la luz de los departamentos hacia la calle, entregando así algo de la vida interior al transeúnte, manteniéndose la intimidad a través de cortinas. La fachada con grandes paños vidriados también tiene la función de armar distintos juegos de proporción, de luces y sombras, con el elemento vida en constante variación. 

Es destacable la aislación térmica de la fachada al oeste. Se colocaron en el exterior cortinas a tablillas dejando un amplio volumen de aire aislante entre éstas y la superficie vidriada; se hicieron unos orificios en la losa para permitir la ascensión del aire caliente y así generar una corriente vertical que enfríe la superficie vidriada. Además se colocaron aletas graduables de vidrio en la fachada y aletas fijas en el tubo de ventilación vertical detrás del ascensor de modo de generar una ventilación cruzada en el living; y la pared de ladrillo a la vista se hizo doble, con el interior ventilado.

El color se ha utilizado en el interior, en tonos pasteles, como uno de los elementos de importancia para evitar, según los autores, una posible sensación de frialdad de las formas puras, y para valorizar ciertos planos según su colocación y sus distancias respectivas; en el exterior, colores más vivos y transparentes, constituyen un elemento de composición complementario del molduraje. 

Este edificio es un ejemplo de la manera en que los arquitectos proponen una concepción diferente de la vivienda frente a los cambios de la vida moderna.